Con la misión fundamental de salvaguardar aves amenazadas endémicas, migratorias y sus hábitats, Conserva Aves en Bolivia ha avanzado rápidamente en sus dos modalidades de implementación, logrando que 8 nuevos sitios inicien el proceso de declaratoria como áreas protegidas subnacionales.
Crédito de fotografía: Steffen Reichle.
Fotografía del ave "Avioncito" (Alectrurus tricolor), categorizada como una especie mundialmente vulnerable.
Con la misión fundamental de salvaguardar aves amenazadas endémicas, migratorias y sus hábitats, Conserva Aves en Bolivia ha avanzado rápidamente en sus dos modalidades de implementación, logrando que 8 nuevos sitios inicien el proceso de declaratoria como áreas protegidas subnacionales.
Conserva Aves cuenta con mecanismos innovadores de implementación, ya sea como Inversiones Directas o Convocatorias de Propuestas, ambas representan vías efectivas mediante las cuales la Iniciativa impulsa sus objetivos de conservación.
Como fruto de la primera convocatoria lanzada en Bolivia a través de la Fundación para el Desarrollo del Sistema Nacional de Áreas Protegidas (FUNDESNAP) y Asociación Civil Armonía, ya se han seleccionado y se encuentran en implementación 3 proyectos que están trabajando por proteger nuevos territorios de vida que cubrirán una superficie de conservación superior a 305,396 hectáreas. Los proyectos son:
-“Declaración de un área protegida departamental de 65,000 hectáreas colindante a los lagos Poopó y Uru Uru para la conservación de aves acuáticas, con énfasis en flamencos y especies migratorias”. La ejecución técnica del proyecto estará a cargo de la organización BIOTA.
-“Fortaleciendo en 165,624 hectáreas el corredor biológico y sociocultural Iténez, del municipio de Baures”, a través de la creación de un área protegida. Localmente la organización FAUNAGUA lidera este proyecto.
-“Aportando al establecimiento de un corredor ecológico altoandino con una superficie de 74,772 hectáreas para el desplazamiento de aves migratorias en río Chilenas, Potosí”. La implementación técnica está a cargo de la organización PROMETA.
A su vez, la evaluación de propuestas de la segunda convocatoria está por finalizar, por lo que en unas semanas se estarán publicando los nuevos proyectos seleccionados en Bolivia.
En cuanto a las inversiones directas, Conserva Aves cuenta con socios nacionales que apoyan iniciativas para contribuir a la conservación del hábitat y sensibilización sobre la importancia de la conservación de tres especies endémicas de Bolivia en los siguientes proyectos:
– “Protegiendo y restaurando el hábitat de la Palkachupa (Phibalura boliviana)” que incluye la creación de al menos 1,000 hectáreas de Áreas Protegidas Comunitarias a través de acuerdos de conservación con comunidades indígenas y campesinas. La ejecución técnica la lidera la Asociación Civil Armonía.
-“Creando Áreas Protegidas para la especie endémica Tororoi o Masked Antpitta (Hylopezus auricularis)” en el municipio de Riberalta. Este proyecto contempla la creación de dos Áreas Naturales de Manejo Integrado (ANMI) municipales, que en total protegerán 18,971 hectáreas. El proyecto es coordinado por la Asociación Civil Armonía.
-“Creación y Manejo de las Áreas Protegidas Comarapa y Saipina para la Paraba Frente Roja (Ara rubrogenys)”, que prevé la creación y manejo de dos ANMI en los respectivos municipios de Comarapa y Saipina, y que en conjunto protegerán 3,324 hectáreas que incluyen sitios de nidificación y alimentación de la paraba. La ejecución técnica es liderada por Natura Bolivia.
Conserva Aves es sinónimo de participación y empoderamiento. Uno de sus pilares principales es la vinculación activa de actores civiles, comunitarios, públicos y privados para trabajar en conjunto en el manejo sostenible de las nuevas áreas protegidas subnacionales. Con la creación de estas nuevas unidades de conservación subnacional, se espera salvaguardar un número significativo de especies de aves migratorias, endémicas y amenazadas, manteniendo ecosistemas más saludables, no solo para estas especies vulnerables, sino para la biodiversidad presente en general.
Las áreas protegidas son una estrategia eficaz de conservación, mitigación y adaptación al cambio climático, que garantiza un gran retorno a la inversión en su protección. Su gestión apropiada permite vincular investigación científica, conservación de ecosistemas a largo plazo, biodiversidad, funciones ecosistémicas y valores culturales, sensibilización y educación ambiental, turismo y recreación, entre otros.
Conserva Aves le apuesta, a través de estas inversiones, a continuar creando Territorios de Vida en la región de la mano con nuestros socios locales y el apoyo de Bezos Earth Fund.